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VÍVAC
Es fácil de hacer. Sirve para pasar la noche
siempre que el viento no varíe mucho de dirección.
Se clavan en el suelo dos ramas gruesas con la parte
superior en forma de horqueta. Sobre ambas se
cruza un travesaño y allí se sujetan los palos que darán
de estructura al techo. Éste se cubre con hojas,
paja, plásticos, o lo que haya a mano. Pueden
entrecruzarse también palos transversales, paralelos al
travesaño, para hacer más rígido el techo y ayudar a
sostener su cobertura.
La
dirección del viento debe ser perpendicular al techo y
el fuego - si se enciende uno - debe estar a algo más de
1 m por el lado abierto del vívac.
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Una
forma útil - aunque lenta - de cubrir el techo es
solapando hojas atadas a los palos transversales, como
muestra el dibujo.
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Plano de un vívac (vistas frontal,
lateral y superior según método Monge de proyección
ortogonal):
Fuentes de información: Escultismo para Muchachos
(BP), Manual de Supervivencia (US Army), Mi Adelanto
Scout (GS 91)
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